Asignatura grado en criminología

Asignatura grado en criminología

POLÍTICAS DE SEGURIDAD Y PREVENCIÓN DEL DELITO

Código Asignatura: 66043011

NOMBRE DE LA ASIGNATURA
POLÍTICAS DE SEGURIDAD Y PREVENCIÓN DEL DELITO
CÓDIGO
66043011
CURSO ACADÉMICO
2024/2025
DEPARTAMENTO
SOCIOLOGÍA III (TENDENCIAS SOCIALES)
TÍTULO EN QUE SE IMPARTE
GRADO EN CRIMINOLOGÍA
CURSO
TERCER CURSO
SEMESTRE 1
OBLIGATORIAS
Nº ECTS
6
HORAS
150
IDIOMAS EN QUE SE IMPARTE
CASTELLANO

El crimen es un hecho social estadísticamente normal y no ha existido, no existe y no existirá en el futuro sociedad alguna en la que no se produzcan hechos criminales porque son hechos sociales producidos, exhalados, por la misma sociedad. Algunas de estas conductas sociales se las considera desviadas de los patrones normales y reciben la calificación de faltas de respeto, o de educación, o de solidaridad o faltas administrativas, pero sólo unas pocas de ellas están tipificadas como delitos en una norma jurídica con rango de ley, y esas son las conductas desviadas que una sociedad concreta en el tiempo y en el espacio considera más peligrosas, perseguibles, evitables o sancionables.

En la sociedad occidental actual hemos pasado de la sociedad del riesgo a la sociedad del miedo. En ella, el nuevo papel estelar lo ocupan las víctimas de la delincuencia, cuya situación es proyectada por unos medios de comunicación social que convencen a la audiencia de que cualquiera puede ser víctima. La realidad es que convertirse en víctima no constituye un fenómeno aleatorio, si bien desarrollarás la percepeción de que es muy probable que seas víctima cuando la probabilidad es bajísima. De esta manera, se crea una situación de pánico infundado que permite a los partidos políticos fomentar una estéril expansión y endurecimiento del derecho penal (por más que se endurezcan las penas no disminuye la delincuencia), acompañado por un masivo y desproporcionado despliegue de fuerzas policiales para tranquilizar a sus votantes, quienes probablemente no tenían un elevado riesgo de padecer ningún delito.

En este contexto la Política de Seguridad tiene que ver con diferentes modelos policiales, ya sean de origen civil o militar, ya tengan una estructura local o central; pero siempre escalada en tres grados: la Política de Seguridad Represiva, que es la que realiza cualquier Estado, máxime si sus leyes son democráticas, al perseguir a criminales peligroso como terroristas o mafiosos para ponerlos a disposición judicial, utilizando para ello recursos tecnológicamente avanzados, con varias y profundas fuentes de información y documentación, y con métodos sofisticados de análisis para validar las pruebas que necesiten para que los responsables de los delitos sean condenados por los tribunales competentes. La Política de Seguridad Reactiva, que es la que auxilia rápida y eficazmente a una víctima de un delito y cuya eficacia no sólo depende de la rapidez de la respuesta policial sino, sobre todo, de la rapidez de la solicitud de ayuda emitida por la víctima a la policía, ya que se estima que las víctimas tardan más de media hora en sobreponerse y llamar a la policía y cuando llegan es imposible detener al delincuente y muchas veces no quedan o están estropeadas las pruebas. Y la Política de Seguridad Preventiva, en la que haremos hincapié en esta asignatura, por cuanto que lo que pretende es evitar o disminuir la frecuencia con que aparecen los delitos y que, por resumir, podemos concretar en cuatro estrategias:

  • Prevención Social Temprana, que pretende evitar que se desarrollen actitudes delictivas por parte de la población, y para ello pretende atender a las madres solteras adolescentes de clase baja en algunas etapas de la crianza de su hijo, atender a los niños maltratados o hiperactivos y con déficit de atención en los colegios, enseñar a los padres a tratar, educar y corregir a sus hijos, desincentivar la delincuencia por ruinosa y peligrosa para quienes la practican, fomentar el empleo juvenil a través de talleres, fomentar el control social informal por parte de los vecinos, solicitar a los medios de comunicación que cambien su estrategia de sangre y miedo, y fomentar la prudencia a la hora de evitar momentos, lugares y compañías peligrosas.

  • Prevención Situacional, que pretende limpiar, iluminar y ordenar el espacio en el que se desarrollan las acciones sociales en general, evitando facilitar la labor de los delincuentes, especialmente contra el patrimonio, en ciudades donde en lugar de sembrados de melones o corrales de gallinas hay auténticos sembrados de coches de última generación y casas abandonadas durante días, llenas de aparatos tecnológicos fáciles de transportar y de vender en el mercado negro. Para ello los videos, las luces en los portales durante todo el día, evitar los coches abandonados y las calles sucias, etc., facilitan la defensa del espacio y es aquí el momento en el que cobra alguna utilidad el despliegue de policías uniformados.

  • Prevención Policial, que no sólo esté presente, sino que esté implicada y relacionada con la comunidad obteniendo información de la misma y prestándole los servicios de seguridad que demandan o, en caso necesario, atendiendo a las víctimas de la delincuencia desde la oficina de denuncias hasta la orientación y provisión de otros servicios del Estado que pudiera necesitar de carácter jurídico, sanitario, psicológico, económico, etc. La acción preventiva de la policía necesita surgir desde la comunidad y mezclarse con la comunidad, sabiendo que esa labor de acompañamiento de la policía es importante pero no la principal.

  • Prevención Penal, que pretende disuadir con las penas de que alguien cometa un delito (cuya efectividad es escasa), o apartar de la sociedad durante un tiempo a un penado, resocializándolo y reinsertándolo para sacarlo del mundo de la delincuencia y ganarlo para la comunidad. Tal vez, más que la estéril expansión y endurecimiento del Derecho Penal habría que endurecer las sanciones económicas, hacer más riguroso el régimen penitenciario y ayudar a las víctimas a su resocialización y reinserción social.

  • Esta asignatura, dentro del área de Ciencia Política y Sociología, está relacionada con aquellas vinculadas con Política Criminal y Política Social. Resulta de especial interés profesional para los estudiantes que aspiran a formar parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad de Estado o integrarse en empresas de seguridad privada.