Control Estadístico de la Calidad

Durante la segunda guerra mundial tomaron gran impulso los denominados  Métodos de Inspección por Muestreo por su gran capacidad de aplicación en la industria y dada la necesidad de fabricar, rápidamente, grandes cantidades de material de precisión, muchas veces elaborados con máquinas y operarios no adecuados.

Estas técnicas tienen como propósito el de analizar si el material producido o suministrado es satisfactorio, examinado solamente unas cuantas unidades.

Se suelen distinguir dos posibilidades de inspección: Una, al comienzo o final del proceso y, otra, durante el proceso de producción.

Esta segunda posibilidad es la más utilizada y se denomina Control de Calidad. Suele realizarse con ayuda del denominado gráfico de control correspondiente a un determinado parámetro representativo del proceso de producción; así, hablaremos del gráfico de control para la media cuando pensemos en controlar el proceso de producción examinando la media poblacional de una variable característica del proceso. Por ejemplo, si se están fabricando tornillos de una determinada longitud, la longitud media de los tornillos fabricados será la característica a controlar.

Digamos que es habitual realizar un control de calidad para alguna característica de posición (media, proporción, etc.) y otro para una de dispersión (desviación típica, recorrido, etc.) de la variable en observación (en el ejemplo, longitud de los tornillos fabricados).

Por tanto, se hablará, además del gráfico de control para la media, del gráfico de control para el Recorrido, del gráfico de control para la desviación típica, etc.

Este tipo de gráficos consta de una línea central que corresponde a la característica en estudio (media poblacional, etc.) y dos líneas que marcan los límites de la región de aceptación del test de hipótesis sobre dicho parámetro (véase CB-capítulo 7). Por tanto, son muy importantes las suposiciones sobre la variable en observación (distribución normal, varianza conocida o desconocida, muestras pequeñas o grandes, etc.), pudiendo, por tanto, hablar de gráficos de control clásicos y robustos.